Un estudio encabezado por El Pentágono, concluyó que Bitcoin y las redes blockchain en general, podrían ser más centralizadas de lo que parecen.

El Pentágono dio a conocer un estudio realizado por una unidad especial, en el proceso se encontraron distintas vulnerabilidades en Bitcoin y Ethereum.
El desarrollo de esta investigación estuvo a cargo de Trail of Bits, empresa fundada en 2012 para brindar servicios de seguridad y solución de problemas informáticos para grandes empresas.
La unidad especial encargada fue la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa (DARPA), la cual se encarga de asuntos relacionados con defensa militar avanzada en EE. UU.
Recordemos que Bitcoin es una tecnología que ofrece una moneda digital rastreable y al mismo tiempo anónima. El fundamento del sistema es ofrecer un sistema de intercambio de valores descentralizado, es decir, independiente de gobiernos y empresas.
Es en parte este discurso lo que incrementó la adopción de Bitcoin, hasta llegar a su valor más alto (USD 60,000) en noviembre del año pasado. Este optimismo por las criptomonedas, despertó la suspicacia de diferentes instituciones financieras y gubernamentales alrededor del mundo.
¿Qué vulnerabilidades encontró el Pentágono?
El estudio titulado “¿Son las cadenas de bloques descentralizadas, centralidades no deseadas en los libros mayores distribuidos?” publicado por DARPA, señala que la cadena de bloques no es realmente descentralizada, utiliza un software obsoleto y además es vulnerable a ataques.
Algunos de los sectores potencialmente afectados son la seguridad -en constante evolución-, fintech, big tech y las industrias criptográficas.
El informe plantea que uno de los obstáculos para la blockchain es la influencia que podrían llegar a tener los programadores en el código y los contratos inteligentes.
Los usuarios tendrían dos opciones delante, confiar ciegamente en que la red es inmutable y que los programadores no introdujeron ningún bug, o decantarse por permitir contratos actualizables o con código de otras cadenas. Lo que representaría, según el informe, “ los mismos problemas de confianza que un enfoque centralizado”.
“¿Están las #blockchains realmente descentralizadas? El análisis que encargamos a @trailofbits descubre centralidades no deseadas y brinda información importante sobre los impactos potenciales de las vulnerabilidades de seguridad dentro de esta tecnología.”
¿Qué pasa con Bitcoin y Ethereum?

Por otro lado se mencionó que las dos criptomonedas principales pueden ser interrumpidas por un reducido número de usuarios, “cuatro para Bitcoin, dos para Ethereum y menos de una docena para la mayoría de las redes PoS”.
Además se señaló que el porcentaje de usuarios que administran nodos es bajo, y aquellos que lo hacen, no reciben ningún motivador que les abstenga de actuar deshonestamente. “La gran mayoría de los nodos de Bitcoin no parecen participar en la minería y los operadores de nodos no enfrentan una sanción explícita por deshonestidad”.
El tráfico de Bitcoin fue otro de los puntos abordados, ya que el 60% de este, es procesado por solo tres ISP (Proveedor de Servicios de Internet). Esto resulta desfavorable para la seguridad y estabilidad de la red ante posibles ataques.
Luego está la funcionalidad del software asociado a Bitcoin, DARPA estima que el 21% de los nodos han estado ejecutando una versión antigua del cliente Bitcoin Core, en el cual se encontraron vulnerabilidades desde junio de 2021.

Estos usuarios desactualizados podrían favorecer una reducción en el porcentaje de nodos necesario para realizar un ataque del 51%. El cual es capaz de modificar la cadena de bloques para insertar transacciones ilegítimas.
Además de esto, se mencionó la vulnerabilidad de los protocolos para minería, los cuales carecen de sistemas de cifrado o autenticación; lo mismo que sucede con el tráfico de transacciones de Bitcoin, esto permite que, “cualquier tercero en la ruta de la red entre nodos (p. ej., ISP, operadores de puntos de acceso Wi-Fi o gobiernos) puede observar y optar por dejar cualquier mensaje que desee”.
Esta investigación surge a poco más de un mes de que Terra protagonizara un evento desastroso que comenzó cuando su stablecoin, UST perdió su paridad con el dólar. Este tropiezo inició una reacción en cadena que llevó a UST y LUNA, su token de respaldo a perder casi todo su valor en unos cuantos días.
Queda por ver cuál será la respuesta que tendrán los diferentes sectores y gobiernos ante este informe. Tal vez, esta sea la oportunidad perfecta para finalmente desarrollar esa CBDC o “dólar digital” que tanto suena últimamente.